martes, 17 de diciembre de 2013

Semana 22, y las náuseas no se van

Cuando las náuseas no se van

Es muy duro vivir un embarazo con náuseas y vómitos que persisten. El primer trimestre de embarazo se me hizo eterno. Era vómitos todos los días, y el Cariban no me ayudaba demasiado. Me pasé tres meses prácticamente en cama, porque al mínimo movimiento me mareaba y vomitaba.
Me costó muchísimo ilusionarme con el embarazo, todo el mundo estaba ilusionado menos yo. En muchos momentos me sentía fatal, porque no me veía capaz de llevar el embarazo a término y porque no estaba contenta. A veces llegué a pensar que no quería al bebé, y me desesperaba.
La verdad es que es desesperante, y muy difícil de entender si no te ha pasado o no lo has vivido de cerca. 
Al final, la situación me obligó a abandonar tres asignaturas de la carrera y a abandonar la mayoría de las cosas de mi rutina diaria. A nivel psicológico es duro.

En mi caso no hubo mucho que hacer, simplemente dejar pasar los días

En Internet o en los libros se leen muchos consejos sobre como sobrellevar las náuseas, truquillos, medicamentos (Cariban) etc. La verdad es que ayuda, pero muy poco. A mi lo que más me ayudó fue dejarme ayudar por los demás, es decir, hacer mucho reposo y estar lo más tranquila posible, con la colaboración de mi pareja y mi madre.
Cada tarde hacía un poco de Yoga, en una forma muy light. Hacía respiraciones para mejorar la ansiedad que me generaba lo mal que me encontraba. 
La cuestión es que los días pasan, y en durante el quinto mes las cosas han mejorado. Tengo náuseas, y me mareo, pero puedo hacer más cosas. Puedo salir a la calle, pasear un rato, comer con normalidad aunque hay muchos alimentos que no tolero.

Lo que más me está costando es mantener una actitud positiva. Con los sustos que estamos llevando y lo mal que me encuentro es difícil. 

Si continuo así hasta el final del embarazo, y no vuelvo a empeorar, ya me doy por satisfecha. Todo sea por la peque y por hacerle espacio.

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