El curso de preparación al parto y educación maternal

Ha ido de poco que no tenga que empezar el curso en mi semana 34.

El caso es que al ir por embarazo de riesgo, dejé de visitar a mi comadrona. En mi primera visita de la semana 9 me dijo que no había problema con que siguiera yendo si tenía dudas. Pero al tener tantas ecografías y visitas juntas me he saturado bastante y no he vuelto ni una vez.

Mi ginecóloga es un encanto, y se toma muy en serio las cosas 'médicas'. Claro, para eso es ginecóloga. Cuando ha habido algún problema en las ecos, reacciona muy rápido y controla muy bien los tiempos. Pero no es como ir a la comadrona que está más pendiente del bienestar de la futura mamá y de otros aspectos relacionados con la maternidad.

La cuestión es que al no ir a la comadrona hay cosas que se han ido dejando. Yo pensaba que mi ginecóloga me avisaría sobre cuando empezar el curso, pero no ha sido así y en una visita, en la semana 25, se lo recordé....y me dijo: 'Si si, apúntate rápido que están saturados!!! Y suelen empezar en la semana 28'.' Ahhh qué me tengo que apuntar yo????' Así que a los 10 minutos estaba yo en la cola para apuntarme a dicho curso. Pero ya íbamos tarde.

Me dijeron que me llamarían y no lo hicieron. Y este lunes se me ocurrió pasar a preguntar cuando empezamos. Y para mi sorpresa, resulta que estaba apuntada al curso de marzo !!!!! Le expliqué mi situación, que la ginecóloga augura que la peque probablemente saldrá antes: cómo voy a empezar en Marzo!!!!

De repente me entró una sensación de vamos tarde.... y un agobio tremendo. Al final logré convencer a la administrativa de mi situación y conseguí que me cambiaran para la semana que viene. Así que todo arreglado! Tengo muchas ganas de empezar el curso y poner en marcha las compras. No sé si es lo normal, pero todavía me resisto  a comprar las cositas de la peque. Me hace mucha ilusión pero creo que aún no me he hecho a la idea de lo que viene.

Semana 27, a puertas del tercer trimestre

Sólo quedan 13 semanas o menos....

El segundo trimestre ha sido mucho mejor en cuanto a síntomas. Muchos menos vómitos, menos náuseas y más energía. Emocionalmente he estado más estable, porque el primer trimestre eran lloros y altibajos. Aunque con más miedos, porque en las ecografías siempre sale el tema del poco líquido amniótico, es como un fantasma que nos persigue eco tras eco.

En nuestra eco de la semana han visto que la niña crece bien. Hemos pasado de un percentil 8 a un 21. Aunque no es muy grande, parece ser que tiene las patas muy largas :). Sobre el cuello del útero, está perfecto, sigue en sus 35 mm.

Y sobre el líquido, es un ROLLO. Porque esta vez la ecografía empezó con las siguientes palabras: 'si que vemos líquido, tranquila'. Con lo cual me tranquilicé mucho. Pero luego se pusieron a medir el ILA (Indice de líquido amniótico), midiendo los bolsillos máximos de líquido en cada uno de los 4 cuadrantes (dividen el útero en 4 cuadrantes donde medir) y no encontraban....bueno al final si encontraron, después de 3 mediciones, pero el resultado fue muy bajo: 5 cm. En el límite de lo que se considera 'no patológico'. 

Hay que decir que la tocóloga que lo midió estaba en prácticas, asistida por un tocólogo muy experto. Y eso es lo que me pone de los nervios. Por qué en un caso difícil como el mío dejan medir a los 'novatos', no lo entiendo.

Al final me dieron un informe con la eco,  y la conclusión era que todo estaba normal. La ginecóloga nos hizo pasar a una sala y nos explicó que la niña crecía armónicamente, y que las patologías están ya estudiadas y descartadas. Con lo cual, la conclusión final sigue siendo que hay mala transmisión de los ultrasonidos, que mi útero es 'raro' y que si que hay líquido, pero que no se ve. Por tanto es difícil de medir. Así que de momento tranquilidad y no preocuparse.

La ginecóloga me dijo que teníamos dos opciones dentro del sistema de la seguridad social: llevar el embarazo en la clínica de mi ciudad o llevar un control mixto con el otro hospital más especializado que ya me está controlando en paralelo. Al final me decidí seguir con los controles en los dos hospitales y tener también la opinión de los que son más especialistas.

Desde luego por falta de control no quedará...seguiremos con ecos cada 2 semanas.

Empezando a hacer el nido

¿Tenéis el síndrome del nido?

Como ya he comentado  en otras entradas, mi embarazo está siendo un poco estresante porque las ecografías no acaban de salir del todo bien y tengo un embarazo de riesgo por el útero doble. Por eso, estoy conteniendo al máximo mis ansias por comprar cosas para la peque. A veces me pongo muy triste porque ya la quiero mucho y me  gustaría estar super emocionada con su llegada, y no frenar mis emociones. Creo que no es demasiado bueno, pero que es cuestión de tiempo estar mejor e ir ganando confianza.

Pero debo reconocer que des de hace un par de semanas pienso en empezar a comprar cosas. Y lo que es más curioso, en como adaptar el piso a la llegada de nuestra peque. La verdad es que no soy una persona que dedique demasiado tiempo a decorar la casa, quizá porque siempre, hasta ahora, he ido de culo en el trabajo, más los estudios, y pocas horas he tenido para pensar más allá de eso. Y curiosamente ahora tengo muchas ganas de tener un hogar práctico y confortable. ¿Será el síndrome del nido?

No sé donde he leído o oído hablar sobre el síndrome del nido. La wikipedia dice lo siguiente: 

Se conoce como Síndrome del Nido a un tipo de conducta que se produce con frecuencia en las mujeres embarazadas consistente en incrementar el tiempo dedicado al orden y limpieza de la casa, a poner en orden las estancias, lavar las ropas, etc. Este tipo de conducta se da principalmente en el tercer trimestre del embarazo, es decir en fechas que se acercan a término. Algunos expertos plantean como hipótesis para explicar esta conducta que es una forma de afrontar la ansiedad ante la llegada del nuevo bebé, o como deseo de controlar la nueva situación. En todo caso esta actividad provoca sensación de tranquilidad y confianza a la futura madre.

El caso es que el tercer trimestre está aquí, y bien es cierto que pensar en el futuro del bebé me tranquiliza y me da confianza. Mi plan para el nido es el siguiente:

1. Cambiar el armario actual que hay en la habitación del bebé al pasillo. Este armario será para almacenar cosas nuestras y de la casa.
2. Regalar el resto de muebles que hay en la habitación a gente que los necesita. Hoy en día la gente se presta a reutilizar muchísimo más que antes y no he tenido problema para encontrar gente que los necesita.
3. Pintar habitación de la bebé. De blanco, toda la habitación será blanca menos las cortinas, que son de una amiga, y unos vinilos que compraré, aún tengo que encontrarlos, y que darán un tono más divertido a la habitación.
4. Comprar muebles nuevos. Hemos decidido comprarlos en Ikea, básicamente por el precio. Compraremos el armario, la cómoda, el cambiador y un mini escritorio. 
5. Moisés. El moisés para los primeros meses, por suerte, me lo van a dejar.
6. Comprar cuna. Las de Ikea no me acaban de convencer, algunas por la altura, otras porque las veo endebles, ....pero  creo que esperaré lo más que pueda para comprarla y mirar bien ofertas de otras marcas.

De momento el presupuesto que tengo es inferior al que pensaba en un principio,  lo cual es un alivio.

Semana 26, los percentiles

Todo normal, pero hay que vigilar el crecimiento del bebé

Eso fue lo que nos han dicho en la última ecografia, en el seguimiento que nos están haciendo en otro hospital más potente. Parece ser que nuestro caso sale fuera de un hospital de una ciudad pequeña. 

Creíamos que esta eco ya saldría normalizado. Y más habiendo hecho una ecografía hace una semana. No es que haya ido mal, pero es que no acaba de estar una tranquila. Os cuento.

El cuello del útero está perfecto y aguantando, mide 35 mm. Esta era una de las grandes dificultades que íbamos a encontrar al tener un útero didelfo. Pero la realidad es que el cuello está perfecto. Por eso, me han dicho que puedo hacer vida normal, tranquila pero normal.

La ecografia se ha visto mejor que otras veces porque el bebé está más grande. Han podido completar el estudio doppler que estaba incompleto y volver a visualitzar los órganos. Esto también está bien. El líquido amniótico está dentro de parámetros normales. Hasta aquí todo buenas noticias.

El problema ahora es que la bebé es pequeña....la han medido y han sacado un percentil 8 (690gr). Y esto no les ha gustado. Nos han explicado que de momento todo es normal y que las mediciones a veces son erróneas, que tienen mucho margen de error. Pero que hay que seguir el peso del bebé en tres semanas. Así que en tres semanas otra eco. También han comentado que el útero didelfo puede ser el causante, ya que la placenta puede haberse insertado peor que en un útero normal, y que al bebé no le llegue todo el alimento. Pero que de momento no le demos más vueltas.

Me toca hacer reposo después de comer, y estar muy tranquila a nivel mental.

Semana 25, visita a alto riesgo

Poquito a poco y avanzando

Con un embarazo de riesgo, en el que las pruebas no salen del todo bien y con síntomas como náuseas y mareos es fácil imaginar que el tiempo pasa muy despacio. Pero por suerte, no sé si ha sido la Navidad o las fiestas, estas últimas 4 semanas han pasado más rápido.

Hoy hemos ido a la visita de alto riesgo con la ginecóloga. Nos ha dado los resultados a las pruebas del test de o'sullivan, la analítica del segundo trimestre y hemos comentado la última eco, así como otras dudas que hemos tenido en el último mes.

En primer lugar me han mirado la tensión, la tenía un pelín alta pero bien. Es algo que me pasa comunmente. Cuando voy al médico suelo tener la tensión un poco alta. Luego me la miro en la farmacia, y la tengo normal. Y eso midiendola en diferentes farmacias, no fuera que el aparatito estuviera mal...Yo creo que es de los nervios que llevo encima. Después hemos escuchado los latidos de la peque, como siempre muy rápido, es la parte más bonita de la visita. 

A continuació han hecho el análisis de la orina para descartar que haya proteïnas. Me dijeron que es para ver si hay riesgo de padecer preeclampsia. La buena noticia es que ha salido negativa. 

La analítica del segundo trimestre, perfecta! El test de o'sullivan ha dado negativo, con lo cual no hay problemas de diabetes gestacional. Lo único que me han dicho es que hay que reforzar el hierro, y me han recetado unas capsulas que tendré que tomar los próximos tres meses. Lo mejor de todo es que entran por la Seguridad Social. No como pasa con el Natalben, que es carísimo. Sobre este último, la ginecóloga me ha asegurado que no hace falta tomarlo más allá de la semana 14 si la mamá se alimenta bien y no se detectan deficiencias. Por lo visto, el ácido fólico sólo es beneficioso estas semanas para prevenir defectos en el tubo neural y en los órganos. Más allá de esta semana los órganos ya están formados y lo que hacen es crecer. En fin, que ya puedo dejar el Natalben. 

Y sobre el líquido amniótico, parece ser que se reunieron diversos ginecólogos en una comisión para estudiar casos de riesgo. La conclusión de todos es que subjetivamente (es decir, a simple vista) hay poco líquido. Esto puede ser debido a la grasa de la barriga, a la placenta anterior, al tipo de piel que tengo, y a la forma del útero. Pero que al cuantificarlo o medirlo, los parámetros están dentro de la normalidad. Con lo cual, podemos estar tranquilos, aunque me vigilarán cada mes. También porque tengo un útero didelfo y eso no se cambia.

Sobre los síntomas de estos últimos días, he tenido un poco de dolor de espalda, y al caminar noto un pinchazo en la barriga que no me gusta nada. Me ha dicho que es normal, que el útero se está expandiendo. Me ha aconsejado un cinturón para embarazadas. He ido a la farmacia y me hecho con este:

Me ha dicho que es muy importante sujetar la barriguita por la zona de la pelvis. 

Por último, y lo mejor es que me enviaron al curso de preparación de educación maternal y el parto. Empieza sobre la semana 28. Vamos avanzando!!!

El yoga y el embarazo

Con un embarazo de riesgo, todo te lo planteas. Me encantaría ir a clases de yoga para embarazadas.

Pero es un embarazo de riesgo, y estoy teniendo cuidado con todo. Así lo primero que he decidido hacer es leer más sobre el tema. Hace unas semanas comenté con la ginecóloga si podía hacer yoga para el embarazo. Me dijo que adelante, pero que tuviera mucho cuidado con no apretar la barriga y que se lo comentara a la profesora. Al final, con las complicaciones que he ido teniendo, decidí no apuntarme. Aunque estaba motivada, me dio miedo.

Un dia navegando por Internet, encontré el libro: 'Yoga embarazo y nacimiento', de Janet Balaskas (Editorial Kairós).

Está resultándome muy placentero de leer. Da una visión muy natural y calmada sobre el embarazo

Hacer yoga durante el embarazo ayuda a tener una actitud más positiva, ayuda a nutrir el cuerpo y el alma. El yoga hace que podamos concentrarnos mejor en el embarazo y nos adaptemos mejor en cada fase. No sólo a nivel físico sino también emocional.

Durante el embarazo nos volvemos menos racionales para estar más centradas en nuestro cuerpo y en nuestra intuición. 

A nivel físico el yoga potencia la relajación, la flexibilidad y la fuerza, sin agotarnos y de forma muy suave. Reeduca el cuerpo para recuperar la comodidad, la libertad, y la inocencia, cambiando vicios posturales acumulados durante años. Reduce el cansancio, el dolor de espalda, la nausea, la ansiedad, el dolor de cabeza y otras molestias.

Es muy cierto que durante el embarazo nos volvemos muy emocionales. Es algo que llevo experimentando des del principio. Recuerdo las primeras semanas con un llanto injustificado que no sabía porque sucedía. Y las emociones van cambiando. Poco a poco he ido sintiendo una ternura immensa que también me hace llorar. Lloro cuando veo a la peque en las ecografías y lloro cuando veo ropa de bebé. Lloro cuando voy a un concierto de música que me gusta. También cuando pienso que pronto estará aquí y podré tocarla. Y no es un lloro de tristeza o preocupación. Es algo que nunca me había pasado. Es un lloro de ternura.

En este libro se hace mucha referencia a las emociones y como tratarlas. Estoy tratando de No contener las emociones que estoy viviendo, parece ser que no es demasiado bueno. Hay que ser conscientes de ellas, vivirlas con naturalidad y liberarlas.

Semana 24, ecografía de seguimiento

Seguimos con el runrún del líquido amniótico (LA)

Me gustaría estar tranquila, levantarme por las mañanas y pensar, me siento bien, me encanta estar embarazada. Pero mi sensación por las mañanas es más de 'vamos tachando días, uno menos'-

 

Y es que seguimos con poco líquido amniótico. Los médicos hablan de valoración subjetiva, y lo catalogan como oligoamnios. Los oligoamnios es una situación que se da en el embarazo cuando el líquido baja de un cierto parámetro, que se considera 'normal' o adecuado para el bienestar del bebé. (Os dejo un enlace  con el protocolo aplican para clasificar los oligoamnios, las causas y sus consecuencias, en 'Referencias').

 

Por mi parte, cuando en las ecografías consiguen medir el nivel de LA, ven columnas de líquido dentro de valores normales, con lo cual, de momento la gestación va bien, aunque hay que vigilar, por si el LA desciende a valores peligrosos para la vida del bebé. Y en esta última ecografía, el nivel sigue bajo y la ecografía se ve mal. Lo malo del asunto es que nadie consigue explicarnos que está pasando, porque hay poco líquido o porque se ve poco, subjetivamente hablando. A veces lo atribuyen a la mala transmisión de los ultrasonidos (a veces pasa), la colocación de la placenta, mi utero didelfo, la grasa de la barriga....porque parece ser que el bebé está bien.

 

En fin, seguimos sin querer preocuparnos mucho, pero ahí tenemos el problema en cada ecografía y la verdad es que se hace muyyyy pesado. Personalmente, siento bastante ansiedad cada vez que tengo que ir al hospital. Esto es mucho peor que todas las náuseas que haya podido pasar.

 

Por suerte, yo noto a la peque dentro, como se mueve. Supongo que es buena señal.

 

Referencias

Oligohidramnios